Para quienes no sepan lo que son estos pequeños sobres rojos, os lo explicamos. También conocidos como Hong Bao, se utilizan en fechas especiales como el Año Nuevo, cumpleaños o o fiestas para entregar un obsequi en forma de dinero a un familiar o a un amigo. Es una forma de mostrarle tu gratitud por la invitación y para darle buena suerte. Por lo tanto, se trata de una tradición que está muy extendida en todo el país y muy extendida entre los más pequeños de la casa o aquellos que no han contraído aún matrimonio. Una cantidad que suele usarse para comprar regalos o ahorrar.
Tras unos días de celebraciones, hemos conocido un caso que ha llamado mucho la atención. Se trata de una joven que había denunciado a sus padres por, presuntamente, haberse adueñado de 7.500 euros que le pertenecían de años recibiendo sobres rojos por parte de familiares. Les acusaba de haberse quedado ese dinero y no habérselo dado, cuando realmente era para ella. Pero, ¿de quién es el dinero? ¿De los padres o de los hijos?
Aunque parezca un caso desproporcionado, la joven se ha visto obligada a llevarles a un tribunal después de que ambos se separaran y se negaran a pagarles los estudios universitarios. Entonces ella consideró que, entonces, se ayudaría del dinero que había recibido durante años de los sobres rojos, a lo cual, los padres se negaban. Por ello, no tuvo más remedio que presentar su caso a un juez. Finalmente, la sentencia ha salido favorable a la mujer, quien recibirá de sus padres todos los meses unos 200 euros hasta que acabe los estudios.
¿Qué hubierais hecho vosotros en caso de ser el juez?
Fuente imagen: Jpquidores
Fuente: BBC
Alberto Pascual García