Es uno de los auxilios médicos más antiguos. Hasta el invento de la escayola en 1798, no había otra forma de soldar fracturas. Era todo un arte: en el siglo II a. C., Claudio Galeno escribió un tratado sobre cómo prepararlas y colocarlas. Hace 5.000 años, los egipcios ya utilizaban bandas de lino con este fin, y por la misma época, en Babilonia el cirujano Arad-Manai cubría las heridas con vendas para evitar infecciones. Lo malo es que hasta 1825, cuando se inventó la desinfección química, más que curarlas las acentuaban, porque no estaban esterilizadas.
Redacción QUO