La estadística es maravillosa. Pon en manos de dos lumbreras las fechas de 14 años de matrimonios en Holanda y espera cualquier cosa. Hasta que redacten un análisis de 38 páginas para explicar que si te casas el día de San Valentín tienes hasta un 36 por ciento más de posibilidades de divorciarte.
Es lo que han hecho dos investigadores de la Facultad de Negocios y Economía de la Universidad de Melbourne (Australia). Analizaron el registro de matrimonios de 1999 a 2013 y calcularon que, si el riesgo no es un 36 por ciento mayor, al menos será el 18 por ciento. Lo que no está claro es por qué añadieron a la fecha de San Valentín otras que denominan especiales, del estilo 1-2-03, 9-9-99 y 20-08-2008.
¿No serán estas fechas el fruto de una coincidencia? ¿Responden a una arcana tradición holandesa que los autores no desvelan? Lo único que dejan claro es que son relevantes. “Nuestra investigación está relacionada con los recientes estudios sobre las características de las bodas y el subsecuente resultado de los matrimonios pero supera varias limitaciones de esos estudios”, explican en el documento, que aún no ha sido publicado en una revista.
Según ellos, el hecho de haber analizado 1,1 millones de casos confiere a su análisis “mucha más fuerza estadística” que artículos anteriores. Sus conclusiones parecen reveladoras y, según el texto, tienen implicaciones que van más allá del día de la boda. “La elección del día de la boda puede aclara las circunstancias de la pareja y de su compromiso. Sin duda.
Redacción QUO
