Aunque ya nos lo han dicho millones de veces, la Academia Americana de Otorrinolaringología insiste una vez más. Recientemente, ha publicado una guía para ayudarnos a limpiar bien nuestros oídos y, sin hacernos daño.

Vuelve a insistir en que dejemos de introducir bastoncillos de algodón, ya que es una de las causas más habituales por la que se rompe el tímpano. Sin embargo, nos resistimos a ello. Muy a pesar de que tampoco sean demasiado eficaces en esta labor, ya que pueden contribuir a introducir la cera hacia el tímpano y crear tapones.

[image id=»87307″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]

Según aconsejan, lo mejor es limpiar los oídos con una toalla de forma externa y dejar que el cerumen cumpla su función de lubricación y protección contra determinados organismos.

Fuente: entnet.org

Redacción QUO