Conserva tu reserva de oxígeno
En un ataúd normal tendrás aire suficiente para una o dos horas como máximo. Aspira profundamente y aguanta el aire el mayor tiempo que puedas.
Anuda la parte baja de tu camisa, y mete la cabeza por el hueco del cuello, de forma invertida a como lo haces habitualmente.
Usa los pies
Da patadas a la tapa. Cuando se rompa, deja caer la tierra y colócala al fondo del ataúd, junto a tus pies.
Si la tapa es muy pesada, golpéala con algo de metal para que alguien pueda oírte.
Woo gracias