Vivió hace dos millones de años y se trata del mayor tiburón de la historia, alcanzando los 15 metros de longitud, y parte de la explicación para alcanzar este tamaño es el canibalismo intrauterino
La especie se llama Otodus megalodon, y forma parte del grupo extinto de tiburones megatómicos. Se considera que el megalodón es el pez más grande que ha vivido en el planeta. Por su tamaño y aparente ferocidad, también ha merecido que hagan una (fantasiosa) película en la que es el protagonista, “The Meg” de 2018, con Jason Statham como el héroe que lucha contra el monstruo, que por desgracia solo consigue 5,6 puntos, un aprobado justito en IMDb.
Pero ¿cómo de grande era en realidad en megalodon? En la película el tiburón tenía el tamaño de una ballena azul, con 25 metros de largo y un peso de 150 toneladas, pero en realidad es muy difícil saber cuál era en realidad, porque los únicos restos existentes son los dientes fosilizados de estos animales. La palabra megalodon simplemente significa “dientes grandes”.
En un nuevo estudio publicado en la revista Historical Biology, los investigadores utilizaron las medidas del tamaño de los dientes y el cuerpo de 13 especies de tiburones vivos para deducir la distribución de tamaños de los tiburones lamniformes – que comparten ancestros con el Megalodon – a lo largo del tiempo.
Los investigadores confirmaron que en efecto megalodon era enorme, pero no tanto como en la película. El tamaño calculado era de unos 15 metros. En comparación, el tamaño medio de los grandes tiburones blancos está sobre los 3 metros.
Pero lo más impresionante es que este tiburón era mucho más grande que cualquier otra especie de tiburón que viviera en la misma época, hace dos millones de años, o en cualquier otra. Según los investigadores el megalodon era al menos siete metros más grande que el siguiente tiburón más grande conocido en toda la historia geológica.
Canibalismo intrauterino
En parte, lo que permitió que el megalodon se hiciera tan grande tiene que ver con el hecho de que muchos tiburones lamniformes (la familia a la que pertenece) tienen temperaturas corporales más altas que otros tiburones. Un tiburón blanco no es exactamente de sangre caliente como los mamíferos, pero puede mantener algunas partes de su cuerpo a temperaturas más altas que las del agua circundante gracias a vasos sanguíneos especializados que ayudan a retener y distribuir el calor creado por las contracciones de sus músculos.
Esto se conoce como mesotermia, y es probable que tiburones como el megalodon también fueran mesotermos. Esto les permitiría nadar más rápido y cazar en aguas más frías que otros tiburones. Otra posible explicación es el canibalismo intrauterino. Los tiburones lamniformes actuales no salen de huevos que depositan sus madres en el exterior como otros peces. En su lugar los huevos eclosionan dentro de la madre y las crías se desarrollan hasta que están listas para salir del útero.
En este proceso, los pequeños tiburones tienen hambre constantemente, y pueden devorar a los huevos no eclosionados dentro del útero o a veces incluso sus hermanos eclosionados. Este comportamiento tan simpático es muy probable que fuera el de las crías de megalodón. Además esto ejercía una presión evolutiva para hacerse cada vez más grandes y controlar su temperatura corporal.
