Los responsables de Altamira han decidido por unanimidad reabrir al público la cueva donde se encuentra la denominada “Capilla Sixtina del arte rupestre”, unas pinturas prehistóricas que datan de hace entre 14.000 y 20.000 años. Sin embargo, un informe del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), publicado en abril, desaconseja por completo permitir la visita a unas pinturas que sufrieron en el pasado los efectos de la afluencia masiva de visitantes.
Según el informe del CSIC, “la entrada continuada de visitantes provocaría un nuevo cambio microambiental y nuevos aportes de nutrientes que podrían conducir a una fase de proliferación de los microorganismos que pueden dañar las pinturas de Altamira”.
La cueva se cerró por primera vez en 1977 y se volvió a abrir, de forma más restrictiva, en 1982, hasta 2002. Como alternativa, se construyó una réplica, “la neocueva”, en el Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira, ubicado en las cercanías de la cueva original, y que ha sido visitada por más de dos millones y medio de personas.
Redacción QUO
La clave está en cuánto somos capaces de predecir de la pieza, y hasta qué…
Un nuevo estudio prevé un fuerte aumento de la mortalidad relacionada con la temperatura y…
Los investigadores ha descubierto un compuesto llamado BHB-Phe, producido por el organismo, que regula el…
Un nuevo estudio sobre la gran mancha de basura del Pacífico Norte indica un rápido…
Una nueva teoría que explica cómo interactúan la luz y la materia a nivel cuántico…
Pasar dos horas semanales en un entorno natural puede reducir el malestar emocional en niños…