La publicación especializada The New England Journal of Medicine recoge el caso de un paciente de 52 años que fue atendido en el Humanitas Clinical and Research Center, en Rozzano, Italia, de un sorprendente y llamativo síntoma: lloraba sangre.
Tal y como relató, el fenómeno empezó a manifestarse en su casa y el hombre estuvo llorando lágrimas de sangre durante dos horas. Luego, cesaron de la misma forma inesperada en que comenzaron y se reanudaron varias horas después.
Por supuesto, estos síntomas no responden a ningún fenómeno sobrenatural. Los médicos llaman hemolacria al hecho de llorar sangre. No es muy frecuente pero puede deberse a múltiples causas, que van desde simples infecciones a heridas en el aparato ocular. Incluso, se ha observado raramente en algunas mujeres embarazadas, por lo cual se ha deducido que también podría deberse a causas hormonales.
En el caso del paciente italiano, las lágrimas sanguinolentas estaban causadas por la presencia de hemangiomas, un tipo de tumores no malignos provocados por una anómala hinchazón de los vasos sanguíneos del aparato ocular.
Tradicionalmente se han vinculado el llorar lágrimas de sangre con fenómenos sobrenaturales y milagrosos. El caso más célebre es el de Teresa Neumann, una campesina bávara que en la década de 1950 vivió supuestos episodios místicos, que incluían entre sus manifestaciones llorar sangre.