Según la Revista Científica de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA, en inglés), en 2025 habrá más de 80.000 muertes al año por sobredosis de opioides en EE.UU.,lo que supondría un incremento del 147% en relación a 2015. Actualmente, hay más de 4 millones de ciudadanos con adicción a analgésicos y se calcula que al menos 115 mueren al día por un fuerte consumo de ellos, una cifra que puede duplicarse en tan solo 6 años. Esta situación es como para llevarse las manos a la cabeza, más aún cuando muchos de estos pacientes se volvieron adictos por una prescripción médica… ¡siguiendo el consejo de su doctor! Pero ahora puede haber una salida.
Un grupo de científicos del Institut Galien Paris-Sud ha dado con un medicamento que aseguran es menos adictivo y con un efecto analgésico más duradero en el cuerpo que la morfina. Por el momento, solo se ha probado en roedores, así que habrá que esperar para poder verlo en la calle (se tiene que aprobar el proyecto, testarlo en otros animales y ya luego comenzar los exámenes con seres humanos, lo que llevará su tiempo). Al menos, aunque tarde en llegar, esto indica que vamos por el buen camino para atajar de una forma directa esta problemática.
¿Cómo funciona este nuevo analgésico?
La ciencia que hay detrás de este nuevo medicamento se basa en los péptidos que se forman de manera natural en nuestro cuerpo, como es el caso de las encefalinas, unos neurotransmisores opioides que se producen en el sistema nervioso central, que modulan el dolor que sentimos y que se unen a los receptores opioides. En teoría, estos no tienen un potencial alto de adicción, ya que activan receptores periféricos del dolor con un potencial de adicción mucho más bajo que si fuera morfina. Pero estas pruebas no se han podido llevar a cabo debido a las dificultades para que estos péptidos superen la barrera hematoencefálica (sangre-cerebro).
Así que ahora, los investigadores franceses han dado con un nanoanalgésico al que han llamado leu-encefalina (LENK). Este es unido después a un lípido natural y biocompatible llamado escualeno, cuya combinación, una vez inyectada en el paciente, aliviaría la zona dolorida durante mucho más tiempo y reduciendo considerablemente la adicción.
Fuente: Science Advances
Alberto Pascual García