Un modelo matemático demuestra cómo la alimentación en el desayuno afecta a la salud y los niveles de energía de hombres y mujeres
No es malo desayunar una tostada mientras tu pareja elige huevos. De hecho, según un nuevo estudio de la Universidad de Waterloo, esa diferencia podría ayudarte a perder algo de peso.
El estudio, que empleó un modelo matemático de los metabolismos de hombres y mujeres, demostró que los metabolismos masculinos responden mejor de media a una comida cargada de hidratos de carbono altos, como la avena y los cereales, después de ayunar durante varias horas, mientras que a las mujeres les sienta mejor una comida con un mayor porcentaje de grasa, como las tortillas y los aguacates.
«El estilo de vida influye mucho en nuestra salud general», afirma Stéphanie Abo, doctoranda en Matemáticas Aplicadas y autora principal del estudio. «Llevamos una vida muy ajetreada, por lo que es importante comprender cómo decisiones aparentemente intrascendentes, como qué desayunar, pueden afectar a nuestra salud y a nuestros niveles de energía. Tanto si se trata de perder peso como de mantenerlo, o simplemente de mantener la energía, es importante comprender el impacto de la dieta en el metabolismo».
El estudio se basa en una laguna existente en la investigación sobre las diferencias de sexo en la forma en que hombres y mujeres procesan la grasa. «A menudo disponemos de menos datos sobre el cuerpo de la mujer que sobre el del hombre», explica Anita Layton, catedrática de Matemáticas Aplicadas y titular de la Cátedra 150 de Investigación en Biología Matemática y Medicina de Canadá.
«Construyendo modelos matemáticos basados en los datos que tenemos, podemos probar muchas hipótesis rápidamente y ajustar experimentos de formas que serían poco prácticas con sujetos humanos».
«Como las mujeres tienen más grasa corporal de media que los hombres, cabría pensar que quemarían menos grasa para obtener energía, pero no es así», explica Layton. «Los resultados del modelo sugieren que las mujeres almacenan más grasa inmediatamente después de una comida, pero también queman más grasa durante el ayuno».
En el futuro, los investigadores esperan crear versiones más complejas de sus modelos de metabolismo y no limitarse al sexo biológico, sino incorporar el peso, la edad o la fase del ciclo menstrual de cada individuo.
REFERENCIA
Modelling sex-specific whole-body metabolic responses to feeding and fasting
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