Un nuevo análisis apunta a terapias con mensajes de texto y medicamentos como posibles soluciones eficaces

Vapear es una práctica cada vez más extendida, y aunque no es tan enormemente perjudicial como fumar tabaco, también tiene riesgos. Muchas personas lo utilizan como un paso intermedio para dejar de fumar, mientras que otras, especialmente jóvenes, lo adoptan sin haber fumado previamente. Este hábito puede generar dependencia a la nicotina y otros riesgos para la salud. Terminar con esta práctica necesita estrategias efectivas que abordan tanto la dependencia química como los factores de la conducta.

Un nuevo estudio, liderado en parte por la Universidad de Massachusetts Amherst y publicado en la Cochrane Database of Systematic Reviews, analiza las mejores formas de dejar de vapear. La investigación revela que el medicamento vareniciclina, recetado comúnmente para dejar de fumar, junto con programas de apoyo a través de mensajes de texto, puede ser eficaz para abandonar los cigarrillos electrónicos.

Nuevo vicio, nuevo enfoque para dejarlo

Según la autora principal, Jamie Hartmann-Boyce, profesora asistente en la Escuela de Salud Pública y Ciencias de la Salud de UMass Amherst, este es un campo de investigación aún en desarrollo: “Este es un ámbito de investigación en su infancia, pero está creciendo rápidamente y de manera orgánica por personas que vapean y buscan ayuda para dejarlo”.

Hartmann-Boyce señala que muchos utilizan el vapeo como un paso para alejarse del tabaco, pero buscan también formas seguras de dejar el vapeo sin recaer en el cigarro tradicional. Esto es clave, especialmente considerando que los cigarrillos electrónicos tienen evidencia sólida de ser más efectivos que los parches, gomas y otras terapias tradicionales para dejar de fumar, según estudios de Cochrane.

Sin embargo, no todos los casos son iguales. Para algunos jóvenes que nunca fumaron, el vapeo representa una vía hacia la dependencia de la nicotina, y también para el paso al consumo de tabaco, lo que complica la situación y hace que sean necesarias estrategias diferentes para abandonar este hábito.

Mensajes de texto para dejar de vapear

El equipo, que incluyó a los coautores Nicola Lindson y Ailsa Butler de la Universidad de Oxford, examinó nueve estudios aleatorizados con más de 5.000 participantes. Evaluaron la eficacia de distintas herramientas diseñadas para ayudar a dejar el vapeo, similares a las estrategias probadas para el abandono del tabaco.

“Las intervenciones probadas son similares a las que sabemos que funcionan para dejar de fumar,” afirmó Hartmann-Boyce. “Sin embargo, no sabemos si ayudan necesariamente a dejar de vapear, por eso es importante realizar estos ensayos”.

Entre las estrategias más prometedoras, el estudio destaca los programas de mensajes de texto para jóvenes de entre 13 y 24 años. Estos programas ofrecen contenido motivacional, consejos prácticos y refuerzos sociales. “Está claro que este enfoque ayuda a los jóvenes,” dice Hartmann-Boyce. “La pregunta es si también funcionará para otras poblaciones”.

Para los adultos, el medicamento vareniciclina mostró resultados positivos, pero la evidencia es limitada debido al bajo número de estudios disponibles. Según los investigadores, este es un aspecto que requiere más análisis. “Con los resultados de nuestra revisión, los profesionales de la salud tienen evidencia inicial de estrategias específicas que pueden recomendar, especialmente para los jóvenes,” explica Butler. “Sin embargo, necesitamos con urgencia más investigaciones para explorar estas y otras aproximaciones”.

Futuro de la investigación para dejar de vapear

Hartmann-Boyce subraya que la investigación está en curso y seguirá siendo prioritaria dentro de la organización Cochrane: “Esta es una revisión sistemática viva; estaremos buscando nuevas evidencias mensualmente y actualizando el análisis conforme surjan nuevos datos, porque sabemos que esta área de investigación está evolucionando”.

Aunque todavía queda camino por recorrer, este estudio ofrece un primer paso importante para abordar una necesidad creciente: ayudar a quienes desean dejar de vapear y recuperar el control sobre su salud.

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