Un grupo de pescadores ha realizado en Turquía, a orillas del río Eufrates, un valiosísimo hallazgo arqueológico. Se trata del descubrimiento de una serie de figuras talladas en la roca, cuya antigüedad es superior a los 11.500 años, y que datan de finales del Paleolítico.
Las figuras muestran a un hombre armado con un arco, cazando a una serie de animales con cuernos. La escena ocupa un espacio de ocho metros de largo, y hasta la fecha había permanecido oculta por el río. Su descubrimiento ha sido posible debido a que la sequía ha hecho que el nivel del agua baje varios metros.
Muy cerca del lugar en el que se ha realizado este descubrimiento, se encuentra la colina de Gobekli Tepe, en la que está situada el que se considera el lugar de culto religioso más antiguo conocido, y que es 6.000 años más viejo que Stonehenge. Este yacimiento sigue siendo muy misterioso, ya que los arqueólogos han descubierto que fue sepultado de manera intencionada alrededor del año 8.000 adC, aunque se desconoce porque lo hicieron.