Emparejar los calcetines no es tarea fácil. Y más si son lisos y de color oscuro. Solo el ojo experto es capaz de diferenciar un calcetín de otro y así encontrar su verdadera pareja. Para que esto no sea un quebradero de cabeza para la gente de a pie, Pep Torres y Stereonoise Studio idearon una formula para hacer de esta tarea algo más simple. La solución pasa por codificar todos los calcetines con números y letras grandes y claras. De esta forma, es fácil para el ojo inexperto encontrar siempre la pareja correcta de cada calcetín. Además, para que no se vea y que la estética de estos calcetines se mantenga al llevarlos puestos, cabe la opción de que el código quede justo en la planta.
Redacción QUO