La Venus de Renancourt, una belleza de hace 23.000 años

La venus de Renancourt, una estatuilla encontrada en Amiens este año, se une a la colección de figuras femeninas del paleolítico. ¿Diosas de la fertilidad, autorretratos deformados o pornografía prehistórica?

El pasado día 4 de diciembre se presentó al mundo una escultura de una mujer desnuda, encontrada el pasado junio junto a la localidad francesa de Amiens, en las excavaciones prehistóricas de Renancourt. Se encontró por casualidad, bajo unas hojas caídas en una parte de la excavación que iba a ser clausurada. La estatuilla mide apenas 4 cm y se calcula que tiene 23.000 años de antigüedad. Ha sido bautizada, cómo no, la venus de Renancourt. Esta es la descripción que han dado los arqueólogos:

Esculpida en yeso y de 4 centímetros de altura, esta «Venus» es esteatopígica: el volumen de la parte posterior, los muslos y los senos está hipertrofiado. Los brazos apenas están presentes y la cara está representada sin líneas. Esta escultura se adhiere perfectamente al canon estético de la tradición estilística gravetense, que incluye las Venus de Lespugue (Haute-Garonne) y Willendorf (Austria), así como la Venus en bajo relieve de Laussel (Dordoña). Esta «Venus» de Renancourt también tiene un sorprendente «peinado» representado por un patrón de cuadrícula de incisiones finas similares a las de la Venus de Willendorf y, especialmente, de la Venus de Brassempouy (Landas), también conocida como la «Dama con un Capucha.»

Los gravetenses se extendieron desde Portugal a Siberia, y han dejado cientos de estatuillas de pequeño tamaño, eminentemente portátiles, ya que eran nómadas.

Desde el descubrimiento de la venus de Willendorf en 1908 los investigadores se han hecho las mismas preguntas. ¿Cuál era el propósito de estas figurillas? y, sobre todo, ¿por qué se representaban como obesas? Parece una situación improbable en una época en la que los humanos eran cazadores recolectores y es poco probable que disfrutaran de abundancia de alimentos.

La explicación tradicional es que los rasgos sexuales exagerados representaran un culto a la fertilidad o a una diosa materna. Esto resulta especialmente irónica ya que hoy sabemos que la obesidad produce infertilidad. Sin embargo hay otras explicaciones.

Una posibilidad interesante, pero considerada poco probable, es que estas esculturas estaban fabricadas por mujeres, y que a falta de espejos, representaban su cuerpo desde la perspectiva de sus propios ojos, con las distorsiones que se producen al mirar hacia abajo. También podríamos estar ante pornografía paleolítica, la versión prehistórica de la revista Playboy.

El descubrimiento en Amiens es importante por el excepcional estado de conservación, y porque en Francia no se habían descubierto estatuillas de esta época desde 1959. En tan solo cinco años ya se han extraído quince más del yacimiento de Renancourt. Esto hace pensar que se trata de un sitio dedicado a la fabricación de estatuillas.