Mattel ha presentado su nuevo invento: una Barbie con conexión a Internet. Eso no quiere decir que el modelo venga ahora más aparatoso ni tampoco con cables, será muy semejante al funcionamiento de Cortana de Microsoft o a la famosa Siri de Apple. Eso sí, con cuerpo, cara, vestiditos y un modus operandi algo siniestro.

La muñeca se ha bautizado como Hello Barbie y será exactamente igual que la clásica pero con un software llamado PullString desarrollado por la compañía ToyTalk. Este programa convierte a Barbie en la primera muñeca interactiva con reconocimiento de voz que permite a los niños hablar con ella y que ésta les responda. Para que la muñeca pueda hacer esto es necesario que las conversaciones que mantienen los pequeños sean enviadas a terceros para su procesamiento.

Bye, bye privacidad

Precisamente en este último punto es donde está el gran problema. El algoritmo que las empresas usan para el reconocimiento de voz implican que la grabaciones sean enviadas a servidores de terceros, ya que es imposible, por su complejidad, ejecutarlas en el juguete. Si observamos detenidamente las cláusulas que ToyTalk establece para su software en la página web, la cuestión queda mucho más clara. Tanto las fotos como las grabaciones que se obtienen de sus aplicaciones «pueden ser utilizadas para la investigación y el desarrollo con el fin de mejorar el sistema de reconocimiento de voz, los algoritmos o crear una experiencia de uso más gratificante». Después explican que para poder hacer eso necesitan enviar las conversaciones que tus hijos tienen con Barbie a terceras empresas, lo que ha generado una obvia polémica al ver en la inocente muñeca un dispositivo de escucha.

¿Podría la policía hackear un juguete y observarnos a través de él?

Aunque los riesgos a la privacidad han quedado más que claros, el juguete abre otras posibilidades intrigantes. Imaginemos que se sospecha de que hay malos tratos en un hogar ¿podría la policía conectarse a Barbie y observar qué ocurre a través de ella con el fin de obtener pruebas? Si bien esto parece una buena alternativa de uso para esta muñeca, también abre la pregunta de ¿podría conectarse un hacker con el fin de utilizar a los niños con fines ilegales y malévolos? La respuesta a todas estas preguntas parece ser afirmativa. La polémica está servida.

Aquí puedes ver a la nueva muñeca conversando con su doble humana:

[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=35XCUbscziE[/youtube]

Fuentes:

theatlantic.com | nytimes.com | time.com |

Redacción QUO