Vino de la rueda

Alerta de cambio de neumáticos

La goma se va desgastando y desgastando sin que seamos conscientes del riesgo que conlleva circular con una profundidad de dibujo inferior a 1,6 mm. Para evitarlo, Continental tiene previsto lanzar en 2017 los in-Tire, unos neumáticos con sensores de presión que detectan cuándo es necesario sustituir las ruedas. Su software calcula la profundidad del dibujo en función de los cambios graduales en la rodadura.

Funcionamiento ‘all weather’

Neumáticos de invierno, de verano… Ambos son incompatibles, y cada estación requiere los suyos. Al menos hasta ahora. Un compuesto hecho de sílice con una escultura en V de laminillas 3D con autobloqueo puede ser la solución. Desarrollado por Michelin, aumenta la rigidez de la banda y, en consecuencia, mejora las prestaciones.

Generación de electricidad

Mientras ruedan, producen energía. Los BH03 de Goodyear, todavía en fase de prototipo, son capaces de la proeza combinando una doble tecnología. Por una parte, cuentan con un material termoeléctrico que produce electricidad a partir del movimiento, la luz y el calor. Por otra, los neumáticos tienen un compuesto piezoeléctrico que logra transformar en energía la presión generada por la deformación de la estructura y las vibraciones.

Adaptación a diferentes terrenos

Bajar la presión de los neumáticos para mejorar la adherencia es aconsejable en ciertas condiciones. Pero bajarse del coche a hacerlo es un incordio. Para evitarlo, Goodyear ha desarrollado un prototipo, el Triple Tube, con una bomba de inflado que alimenta tres cámaras interiores desde una principal. Así, el neumático dosifica la presión y se prepara para adoptar el estado más adecuado antes de entrar en curva o adentrarse sobre arena.