Por si no existiesen suficientes razones para preferir vivir en una mansión lujosa antes que en una chabola, un estudio realizado por Vernard Lewis, un entomólogo de la Universidad de California, acaba de encontrar otra más. El investigador ha comprobado que las casas de la gente rica tiene mejores bichos que las de las personas con pocos recursos económicos. Y entiéndase el término «mejor» en el sentido de «más saludables».
Efectivamente, según el informe de Lewis, los insectos que habitan en los vecindarios lujosos, son menos nocivos para la salud de las personas, y es menso probable que puedan transmitirnos una enfermedad infecciosa. Por el contrario, según el mismo informe, la gente con pocos recursos vive en barrios socialmente más degradados y abandonados, en los que la limpieza y las condiciones higiénicas no son siempre todo lo deseables que debieran, lo que provoca que su fauna insectívora sea menos «saludable».
Vernard Lewis se refiere, por tanto, a un «efecto lujo» que se extiende más allá del ser humano, y afecta incluso a la fauna y vegetación que nos rodea. En definitiva: nada es inmune a las consecuencias de la desigualdad social.
Fuente: http://www.seeker.com/the-rich-even-have-better-bugs-in-their-homes-1956560099.html
Vicente Fernández López