Irán es un país con unas normas sociales muy estrictas (por decirlo de alguna manera). Y más aún para las mujeres. Pero, poco a poco, las jóvenes se esfuerzan por ganar pequeñas (muy pequeñas) parcelas de libertad. Aunque no lo tienen fácil. Y, precisamente, una de esas parcelas es la de poder practicar parkour, un deporte urbano habitual en las ciudades occidentales y que, desde hace un par de años, está enganchando a muchas chicas iraníes. Eso sí, las normas a las que aludíamos exigen que chicos y chicas practiquen este deporte por separado.
Estas fotos nos demuestran que la energía de la juventud es una fuerza igual de imparable en cualquier lugar del mundo.