Durante la II Guerra Mundial, y también en la contienda de Corea, los pilotos estadounidenses tenían la costumbre de tunear sus aviones pintando sugerentes imágenes de seductoras mujeres, inspiradas en las pin ups de la época, y en actrices como Rita Hayworth y Betty Grable. Vista hoy, esa costumbre puede resultar sexista, pero hay que encuadrarla en aquella época y en el contexto en el que se desarrolló.