De acuerdo con un reciente estudio es probable que los habitantes del norte de África hayan sido los primeros habitantes de las Islas Canarias, alrededor del siglo XI.
Los responsables, liderados por Rosa Fregel, de la Universidad de Stanford, han publicado los resultados en PLOS ONE.
Numerosos estudios sobre la cultura y la genética de los habitantes de las Islas Canarias, señalan a los bereberes del norte de África como los pobladores iniciales, pero las actividades humanas más recientes, como la conquista española, el inicio de las plantaciones de caña de azúcar y el comercio de esclavos, han cambiado la composición genética de la población nativa. Para arrojar luz sobre quién colonizó por primera vez el archipiélago, el equipo de Fregel analizó 48 genomas mitocondriales antiguos de 25 sitios arqueológicos en las siete islas principales. Seleccionaron genomas mitocondriales porque, como se heredan directamente de la madre, son especialmente consistentes y útiles para rastrear las migraciones humanas.
Los investigadores descubrieron linajes que solo se han observado en África del Norte Central, y otros que tienen una distribución más amplia que incluye África del Norte Central y Occidental y, en algunos casos, Europa y el Cercano Oriente. También identificaron cuatro nuevos linajes específicos de las Islas Canarias, que, cuando se analizaron en conjunto, mostraron ser consistentes con la datación por radiocarbono que muestra que las personas llegaron a las islas en el siglo XI.
Además, los investigadores encontraron que la distribución de los diferentes linajes en cada isla varía dependiendo de la distancia de la isla al continente, lo que respalda estudios previos que señalan que las islas experimentaron al menos dos eventos de migración temprana distintos.
Los linajes de las Islas Canarias descubiertos en este estudio encajan en un patrón más amplio de migración del Mediterráneo a través del Norte de África, como parte de la expansión neolítica de humanos desde el Medio Oriente a Europa y África. La presencia de estos linajes sugiere que los bereberes ya se habían mezclado con los grupos mediterráneos en el momento en que colonizaron las islas.