Por Rocío Rodríguez Herreras. Delegada técnica de Observer®ScienceTourism en Castilla y León
Un viaje de ciencia desde la ingeniería más antigua a la más actual por los puentes de España
Esta semana, en la sección de viajes de ciencia de @observer para Quo.es, os proponemos un viaje histórico- científico desde la época romana hasta la actualidad, acompañados de unos guías de excepción: los puentes. Visitaremos espectaculares espacios urbanos y asombrosos rincones enclavados en un entorno natural.
Decía Isaac Newton que “los hombres construimos demasiados muros y no suficientes puentes”; sin embargo, son innumerables los que encuentra el viajero de ruta por España. En la Prehistoria un puente era simplemente un tronco sobre un arroyo. Más tarde, los romanos utilizaron materiales pétreos , el “tornillo de Arquímedes y el número de oro para sus funcionales puentes dotados de simetría y proporcionalidad. Durante la Edad Media se aprovecharon los puentes romanos para el trasiego de gentes, mercancías o peregrinos y en el Renacimiento, recuperados los manuscritos de Vitruvio, se adopta de nuevo el estilo clásico. Con la Revolución Industrial aparecen nuevos materiales como el hierro o el hormigón que darán lugar a nuevas formas y estilos. Ya en tiempos recientes, en el siglo XX el acero o el hormigón armado y en el XXI la fibra de vidrio o polímeros como el polietileno continúan tendiendo puentes que además de funcionalidad, presentan estéticas vanguardistas. Comenzamos ya nuestro viaje 2000 años atrás y a lo largo de los siglos hasta el XXI, visitaremos Extremadura, Cataluña, León, Madrid, País Vasco, Asturias, Galicia, Aragón y Andalucía. ¡Espero que lo disfrutéis!
Declarado Monumento Nacional en 1924, el puente de Alcántara está enclavado en el histórico pueblo medieval del mismo nombre, en el Parque Natural del Tajo Internacional y en 2019 fue elegido como mejor puente del mundo en la competición organizada en twitter por The General @jonhygrey. Han pasado casi 2000 años desde que se construyó y parece que se están cumpliendo las predicciones del arquitecto que lo diseñó: “ Perpetua mansuri in seculi mundi “ .Construído sobre el río Tajo para unir España y Portugal, comunicaba Norba, actual Cáceres y Conímbriga, la localidad portuguesa de Condeixa- a –Velha. Impresionan al viajero sus sillares de granito almohadillados, sus 6 arcos y 5 pilares que conforman los 194 m de longitud y sus 58,20 m de altura . La anchura de las pilas es de 9,20 pies, seguramente la medida de la vara con la que se estableció una base unitaria para sus dimensiones. Se realizan rutas nocturnas senderistas al puente de Alcántara, como el “Paseo de los sentidos” en el que los participantes en esta ruta “con ciencia “ disfrutarán también de la flora y del canto de las aves nocturnas. El proyecto del nuevo Puente de Alcántara, en el que se utilizará acero corten, estará inspirado en el romano y situado frente a él. Lo liberará del tráfico rodado, y será un mirador desde el que el viajero podrá disfrutar del puente romano más alto del mundo.
A solo 33 km de Girona, en la comarca de la Garrotxa, tierra de volcanes, se encuentra Besalú, uno de los pueblos más bonitos y visitados de España, declarado en 1966 Conjunto Histórico Artístico Nacional. El puente románico de la villa, presenta grandes tamajares triangulares con arquillos de aligeramiento y 8 bóvedas de distintas luces que buscan en las rocas sus cimientos naturales. Se construyó en el siglo XI sobre el río Fluviá, como principal vía de comunicación, para vigilancia y el cobro de pontazgos a peregrinos y comerciantes. Lo caracterizan sus 135m de longitud, una torre de 30 m, un arco central ojival típico de la arquitectura medieval con una luz de 27m y su planta quebrada. Sobre este “puente de cine” se han rodado escenas de la tercera temporada de la famosa serie de HBO Westworld. Besalú ofrece a los viajeros visitas guiadas en las que se muestra la judería, los baños judíos o los restos arqueológicos de la sinagoga, además del impresionante puente medieval símbolo de la localidad.
Construido en el siglo XVI por el arquitecto y matemático Juan de Herrera, fue realizado en piedra berroqueña, el granito de la Sierra de Guadarrama. Declarado Bien de Interés Cultural en 1996, tiene una longitud de 148,20 m y está formado por nueve arcos de medio punto con por tamajares semicirculares con sombreretes cónicos. Facilita el paso de peatones y vehículos que cruzan Manzanares y es la joya de Madrid Río, gran parque del siglo XXI, donde resalta entre estanques y jardines con lirios acuáticos en este espacio ecológico único en el que conviven más de 30000 árboles de 47 especies. Desde el puente de Segovia el viajero puede disfrutar de impresionantes vistas de la Catedral de la Almudena y del imponente Palacio Real.
A media hora de Bilbao, ciudad que aloja la gran estructura de Titanio del Guggenheim, se encuentra el primer puente- transbordador del mundo, que en 2006 fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. Fue construido entre Portugalete y Getxo a finales del siglo XIX, cuando en ambas orillas de la ría del Nervión florecieron balnearios para burguesía industrial. Inaugurado 1893, el arquitecto Alberto Palacio contó con la ayuda técnica Ferdinand Arnodin, colaborador de Gustave Eiffel. 400.000 remaches calentados al rojo y colocados uno a uno junto con los innovadores cables de acero ligeros de torsión alternada, hacen de esta obra un símbolo de arquitectura en metal, característica de la Revolución Industrial. La estructura metálica fue pintada de negro, pero la absorción de mayor radiación térmica que presenta esta tonalidad, causaba dilataciones bruscas y deterioro en algunas piezas, por lo que desde 2010 luce con el color de los hematites de cercana mina de Somorrostro. Sus 160 m de longitud han transportado a miles de vehículos y peatones en las 5 barquillas que ha tenido desde sus inicios. En 1999 se instaló un ascensor panorámico, un sueño para los amantes del turismo industrial, y una pasarela peatonal a 50m de altura, que ofrece espectaculares vistas panorámicas de la desembocadura del Nervión.
Entre las paredes calizas del Parque Nacional de los Picos de Europa, en este maravilloso espacio natural, mientras recorremos los 12km de la “ruta del Cares” que comienza en Caín (León) y termina en Poncebos (Asturias), descubrimos el famoso Puente de los Rebecos, que forma parte de una de las sendas más transitadas de España. Fue instalado procedente de la presa de Doiras(1934), cuando se abrió la “Garganta Divina” en 1950 para el mantenimiento de la central hidroeléctrica de Camarmeña. Es de “estilo militar, “mecano” o “Bailey” en alusión al ingeniero británico que durante la segunda Guerra Mundial diseñó este tipo puentes de celosía metálica en hierro. Modulares y “transitorios” siguen, hoy en día, utilizándose en todo el mundo. Atentos, porque el nombre del puente hace honor a la fauna de la zona, por lo que a veces se avistan cabras y rebecos, pastando con toda tranquilidad en uno de los caminos más bonitos de España que anualmente recibe miles de visitantes.
En el municipio de Fonsagrada, donde resplandece el Geoparque Mundial de la Unesco Ancares o Courel, certificado por Observer como Espacio de Turismo Científico de calidad llega a su fin nuestro viaje en coche por la provincia de Lugo y comienza la aventura a pie. Ante nuestros ojos, sobre el río Navia, aparece un pintoresco puente colgante de mediados del siglo XX, realizado con hierro y madera. Caminar sobre sus 90m de pasarela, es el único modo de acceder desde esta zona de Galicia hacia Asturias. Río de Porcos nos recibe enmarcado en un paraje de gran belleza, donde la Casa Aldea Chao de Castro alberga un conjunto etnográfico de madera, pizarra y piedra en el que sus dos hórreos son símbolos de la arquitectura tradicional. Allí se inicia el Desfiladero de Bustelín, sendero tallado en la roca, dentro del Parque Natural de Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, para alcanzar entre alcornoques, la llamada Cueva del Oso, en otro tiempo una importante mina de hierro. Como recuerdo el viajero fotografía desde el puente sobre el río Navia, una paleta de colores de naturaleza salvaje espectacular.
La arquitecta Premio Pritzer en 2004 Zaha Hadid, proyectó el Pabellón Puente para la Expo de Zaragoza dedicada al agua en 2008, como un gladiolo tendido sobre el río Ebro. Simulando las escamas de un tiburón, miles de paneles trapezoidales se dispusieron en el pabellón en forma de malla romboidal. El material utilizado, Glassfibre Reinforce Concrete (GRC), es un hormigón reforzado con fibra de vidrio sólido, moldeable y duradero. Con una altura variable entre 15 y 30m y una luz de 185m, de los 260m de longitud, un total de 2200 toneladas de masa a lo largo de 140m se construyeron en tierra firme. La inestabilidad del suelo causó que los cimientos tuvieran una profundidad de 72,5 m logrando así un récord en España. La impresionante edificación impacta al viajero que pronto podrá volver a disfrutar del interior de este espacio de aspecto futurista que albergará el proyecto “Mobility City”. El pabellón- puente será próximamente centro de referencia de movilidad sostenible, automoción, energía y comunicaciones. El único puente habitable de España y uno de los pocos del mundo hace que sea considerado por los profesionales de la arquitectura como el “Ponte Vecchio del siglo XXI”.
Con 3092m de longitud, de los que un total de 1440m se sitúan sobre la bahía, el conocido como “Puente de la Pepa” presume de ser uno de los puentes atirantados más largos del mundo, superando al de Brooklyn y al Golden Gate. Después de ocho años de trabajos en los que se monitorizó el esfuerzo, la temperatura y el nivel de vibración, en 2015 se inauguró este espectáculo de la arquitectura y la ingeniería que une Puerto Real con Cádiz. Es el puente de mayor luz de España, con una distancia de 570m entre sus torres, y está sostenido por 176 tirantes formados por cordones de acero galvanizado y cera microcristalina, recubiertos de polietileno de alta densidad. Sus torres de 185m y un gálibo de navegación de 69m lo erigen como uno de los puentes más altos de España y cuenta con sistemas de luces de balizamiento aéreo y marítimo; debido a su ubicación cuenta con pantallas antiviento preparadas soportar hasta 250 km/h. Desde el Paseo de la Bahía de Cádiz el viajero consigue espectaculares fotografías del puente de noche debido su increíble iluminación, ya que en los tirantes presenta 176 proyectores, con más de 100.000 puntos pixel LED. El paseo peatonal que une un paraíso para “turistas botánicos”, el parque Celestino Mutis con más de 200 especies arbóreas, y la Avenida de la Bahía, ofrece las mejores panorámicas del impresionante puente que ya se considera el icono del siglo XXI de la ciudad de Cádiz.
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