Os presentamos a una especie con “poderes vampíricos”, y no, no tiene dientes con los que quieran chuparnos la sangre. Pero sí posee una característica que hace a este ser vivo muy especial, y es que puede vivir hasta casi 3 siglos en las oscuras y frías profundidades del océano, lejos del sol, al que no necesita para sobrevivir. Se trata de la Escarpia Laminata, un gusano de tubo encontrado entre los 1.000 y los 3.300 metros del océano en las costas del Golfo de México. Estos gusanos, son seres invertebrados que enganchan su cola a una superficie en el fondo del mar y crean a su alrededor un tubo quitinoso blanco. Carecen de ojos y de aparato digestivo, y su longevidad suele ser de entre 100 y 200 años, pero se ha llegado a demostrar que pueden llegar a los 300.
Al ser una especie poco estudiada, los investigadores quisieron comprobar cuál era su esperanza de vida en comparación con otra especies de gusano de tubo que vive en este tipo de ecosistemas, como la Lamellibrachia luymesi, y que vive unos 250 años. Para conseguirlo, marcaron 365 gusanos de la especie menos conocida y midieron cuál era su crecimiento a lo largo de un año. Al comparar los resultados de los crecimientos de ambas especies, se dieron cuenta de que la Escarpia Laminata superaba en 50 años la esperanza de vida de la especie.
La tasa de mortalidad extremadamente baja de estos seres vivos, les ha permitido desarrollar una vida útil mucho más larga. Estos resultados, basados también en la temperatura del agua y su tamaño, apoyan la teoría de la longevidad que establece que en ausencia de cualquier amenaza externa, la selección natural elegirá a aquellos seres vivos que muestran un envejecimiento más lento y puedan reproducirse continuamente hasta la vejez.
Hasta la fecha, el vertebrado más longevo en la Tierra que haya sido registrado fue una tortuga gigante de Galápagos de 177 años, mientras que en el terreno de los mamíferos, las ballenas son las que tienen mayor esperanza de vida, llegando a los 211 años. Y si hablamos de seres vivos que no estén establecidos en colonias, sería la almeja marina (Arctica islándica) la más anciana conocida, con una edad inferior a 507 años.
Fuente: ScienceDaily | Chemo III project