Un nuevo estudio de la Universidad de Lisboa y la UNED da a conocer una nueva especie de dinosaurio saurópodo que vivió en Cuenca hace 75 millones de años: Qunkasaura pintiquiniestra

Los más de 12.000 fósiles recogidos a partir de 2007 durante las obras de instalación de las vías del tren de alta velocidad (AVE) Madrid-Levante pusieron al descubierto este yacimiento, dando lugar a una de las colecciones más relevantes de vertebrados fósiles del Cretácico Superior de Europa. La colección ha sido estudiada de forma continuada gracias a proyectos nacionales y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, lo que ha permitido aumentar significativamente el conocimiento de los ecosistemas del suroeste de Europa durante el Cretácico Superior y también identificar varias especies nuevas para la ciencia.

Reconstrucción en 3D del esqueleto de Qunkasaura, a escala con Don Quijote y Sancho. GBE-UNED

«El estudio de este ejemplar nos ha permitido identificar por primera vez la presencia de dos linajes distintos de saltasauroideos en la misma localidad fósil. Uno de estos grupos, denominado Lirainosaurinae, es relativamente conocido en la región ibérica y se caracteriza por especies de tamaño pequeño y mediano, que evolucionaron en un ecosistema insular. En otras palabras, Europa era un enorme archipiélago formado por varias islas durante el Cretácico Superior. Sin embargo, Qunkasaura pertenece a otro grupo de saurópodos, representado en la Península Ibérica por especies de tamaño medio-grande hace 73 millones de años. Esto nos sugiere que este linaje llegó a la Península Ibérica mucho más tarde que otros grupos de dinosaurios», explica Pedro Mocho, paleontólogo de CIÊNCIAS.

Proceso de restauración de parte de los restos de Qunkasaura. GBE-UNED

Proceso de restauración de parte de los restos de Qunkasaura. GBE-UNED

Una de las características más relevantes del registro fósil de Lo Hueco es la abundancia de grandes esqueletos parciales de dinosaurios saurópodos, poco frecuentes en el resto de Europa. Qunkasaura pintiquiniestra destaca por ser uno de los esqueletos de saurópodo más completos hallados en Europa, incluyendo vértebras cervicales, dorsales y caudales, parte de la cintura pélvica y elementos de las extremidades. Su morfología única, especialmente en las vértebras de la cola, ofrece nuevas perspectivas sobre los dinosaurios no avianos de la Península Ibérica, un grupo históricamente poco conocido.

El estudio, publicado ahora en la revista Communications Biology, identifica a Qunkasaura como representante de los saltasáuridos opistocelicaudinos, un grupo presente en el hemisferio norte (Laurasia). Por otro lado, la mayoría de los saurópodos del Cretácico Superior del suroeste de Europa, incluido Lohuecotitan pandafilandi, descrito previamente de Lo Hueco, pertenecen al grupo Lirainosaurinae, un grupo de saurópodos aparentemente exclusivo del continente europeo. Este estudio sugiere que Lo Hueco es el único lugar donde se conoce la coexistencia de ambos grupos y propone un nuevo grupo de titanosaurios denominado Lohuecosauria, que incluye representantes de ambos linajes. Los Lohuecosaurios podrían haberse originado en los continentes meridionales (Gondwana) antes de dispersarse por todo el mundo.

Reconstrucción de la forma en vida de Qunkasaura pintiquiniestra. José Antonio Peñas Artero

Reconstrucción de la forma en vida de Qunkasaura pintiquiniestra. José Antonio Peñas Artero

El nombre Qunkasaura pintiquiniestra está formado por varias referencias geográficas y culturales próximas al yacimiento de Lo Hueco. «Qunka» remite a la etimología más antigua del topónimo de la zona de Cuenca y Fuentes, “Saura” alude al femenino del latín saurus (lagarto), pero también rinde homenaje al pintor Antonio Saura, y “pintiquiniestra” hace referencia a la gigante “Reina Pintiquiniestra”, personaje de una novela mencionada en “Don Quijote de la Mancha” de Cervantes.

«Afortunadamente, el yacimiento de Lo Hueco también conserva varios esqueletos de dinosaurios saurópodos por determinar, que pueden corresponder a nuevas especies y que nos ayudarán a entender cómo evolucionaron estos animales», concluye Pedro Mocho.

El estudio se enmarca dentro de las investigaciones del Grupo de Biología Evolutiva de la UNED sobre ecosistemas con dinosaurios en el centro de la Península Ibérica. Parte del esqueleto de Qunkasaura ya está expuesto en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha, en Cuenca (España).

Restos óseos de Qunkasaura pintiquiniestra, expuestos en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha. GBE-UNED

Restos óseos de Qunkasaura pintiquiniestra, expuestos en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha. GBE-UNED

REFERENCIA

Imágenes: GBE-UNED