La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica, de naturaleza autoinmune, que causa dolor, inflamación y pérdida de la función en articulaciones. El sexo es también uno de los primeros damnificados en esta situación. ¿Habría algún modo de recuperar la pasión? La respuesta es importante teniendo en cuenta que, según algunas investigaciones, un buen orgasmo podría aliviar el dolor.
La sexóloga neoyorquina Logan Levkoff ha analizado en profundidad la relación entre sexo y dolor y considera que hay evidencia suficiente para pensar que la liberación de endorfinas del orgasmo puede aliviar las migrañas y ayudar a las personas a controlar el dolor crónico en general. “Esto se debe a que las endorfinas bloquean el dolor, al tiempo que mejoran las áreas de nuestro cerebro responsables del placer”.
También la oxitocina que se libera cuando abrazamos y tenemos orgasmos ha demostrado un claro efecto analgésico inmediato para aliviar diferentes molestias. Investigadores del Laboratorio de Dolor y Epilepsia del Instituto de Neurobiología de México plantean esta hormona como alternativa para el tratamiento de dolores crónicos y reemplazar los fármacos opiáceos.
A la vista de estos resultados, la terapeuta Kirsten Schultz, que sufre artritis reumatoide, ha ideado una secuencia de rutinas sexuales que ayudan a vivir con una enfermedad crónica y a transformar el dolor en placer. La primera medida es ajustar el tratamiento para que, una vez rebajado el malestar, el paciente muestre una actitud más abierta a la intimidad y al gozo.
Entre las sugerencias que Schultz expone en su espacio chronicsex.org, destaca la comunicación con la pareja. “Por miedo a causar dolor, puede retirarse y sentir el mismo aislamiento que el paciente”, dice. Saber que están enfrentando esto juntos puede ser de gran ayuda para reconstruir la intimidad y recordarse mutuamente que aún existe atracción. La terapeuta reconoce que este gesto requiere un esfuerzo extraordinario, pero crucial. Según dice, los juguetes sexuales pueden ser también una magnífica opción. “No solo hacen que los orgasmos que alivian el dolor sean más fáciles de alcanzar, sino que también pueden aliviar el estrés del cuerpo, especialmente si el dolor se localiza en las manos o existen problemas de fuerza y movilidad”.