Los trasplantes así denominados abarcan músculos, nervios, huesos, piel y vasos sanguíneos. El mal que remedian no supone un riesgo de muerte, y aún están en fase experimental. Por eso, en España cada caso necesita aprobación individual, tanto de la comunidad autónoma correspondiente como de la Organización Nacional de Trasplantes. Todos los que han recibido permiso eran casos que iban más allá de cuestiones estéticas.
Además de contar con larguísimos tiempos de recuperación, sobre todo porque los nervios crecen a sólo 1 mm por día, los pacientes son conscientes del riesgo de rechazo crónico, del efecto de la inmunosupresión de por vida y de que aún se ignoran las reacciones del organismo a largo plazo.
Óscar, el último y completo
Un accidente le deformó el rostro y le causó tremendas dificultades para respirar y comer. Por eso, se aceptó someterle al primer trasplante total de cara del mundo. A los cuatro meses de ser intervenido en el Hospital Vall d’Hebron, apareció en público el 26 de julio para concienciar de la importancia de estas donaciones. Ya podía hablar, comer y mover las cejas.
Más de 30 operaciones separan la primera y la última imagen de Connie Culp, a quien su marido destrozó el rostro de un disparo. En el hospital de Cleveland (EEUU) sustituyeron el 80% de su rostro original.
Isabelle, el primer rostro
La nariz, boca y barbilla de Isabelle Dinoire desaparecieron por la agresión de su propio perro. Fue la primera persona en recibir parte del rostro de una fallecida. Una semana tras de la operación, realizada en el hospital de Amiens (Francia), podía alimentarse sola. La fotografía de la derecha fue tomada un año más tarde.
Una enfermedad congénita, la neurofibromatosis tipo 1, había ido deteriorando paulatinamente el rostro de Rafael. A sus 34 años, un equipo dirigido por el doctor Tomás Gómez, lo sometió a un trasplante en el Hospital Virgen del Rocío de Sevila. En su primera aparición pública, tres meses después de la intervención, el paciente decía haberse reconocido en el espejo.
Durante esta intervención se utilizó por primera vez la técnica de conectar el rostro donado a una vena de la pierna del receptor antes de retirar la cara de éste. Así se puede descartar un rechazo inicial y mantener irrigados más tiempo los tejidos que van a trasplantarse.
El primer trasplante de ambos brazos de España, y segundo del mundo, lo llevó a cabo un equipo dirigido por el doctor Pedro Cavadas en el Hospital La Fe (Valencia), el 30 de octubre de 2007. Diego Jiménez había perdido su autonomía cuando una descarga eléctrica le quemó ambas extremidades. La recuperación de la movilidad va más deprisa de lo esperado.