Sí. Se sabe que el ser humano incrementa la producción de ciertas hormonas (catecolaminas) en casos de ansiedad, de peligro o de emoción intensos. Ese aumento de secreción se traslada a la piel y la sudoración la expone a olfatos sensibles, como los de los animales. Así que se cree que, cuando un animal lo percibe, lo interpreta como la “antesala” de una reacción agresiva, y se pone en alerta.
Enviada por Alba Vázquez Gracía, correo electrónico
Redacción QUO
La clave está en cuánto somos capaces de predecir de la pieza, y hasta qué…
Un nuevo estudio prevé un fuerte aumento de la mortalidad relacionada con la temperatura y…
Los investigadores ha descubierto un compuesto llamado BHB-Phe, producido por el organismo, que regula el…
Un nuevo estudio sobre la gran mancha de basura del Pacífico Norte indica un rápido…
Una nueva teoría que explica cómo interactúan la luz y la materia a nivel cuántico…
Pasar dos horas semanales en un entorno natural puede reducir el malestar emocional en niños…