Kaiju es monstruo en japonés, y a las películas de ese género se les llama Kaiju eiga. Y de todos los monstruos procedentes del país nipón, el más famoso de todos es Godzilla, un lagarto que muta hasta alcanzar un tamaño gigantesco por culpa de las radiaciones atómicas, y que protagonizó su primera película en 1954.
Japón bajo el terror del monstruo fue el título que le pusieron en España a su primera aventura cinematográfica. Y en ella, haciendo honor a su título, veíamos como los habitantes de Tokio huían espantados mientras la criatura reducía todo a escombros a su paso.
Aquel Godzilla original medía nada menos que 50 metros pero, pese a ello, en los tiempos corren ya no lo tendría tan fácil para realizar su cometido destructor y terrorífico. En el actual Tokio, los rascacielos de zonas como Shinjuku o Akihabara, son muchísimo más altos, lo que provocaría que al monstruo no se le pudiera ver entre los edificios.
Por ese motivo, los productores cinematográficos le han hecho crecer. Ya en la versión norteamericana de 2013, el público puedo disfrutar de un Godzilla tamaño XXL, que alcanzaba los 108 metros de altura. De esta manera, el monstruo ya sobresalía por encima del skyline de la ciudad aunque, en contrapartida, se le veía más macizo y rechoncho. Un Godzilla fondón, para entenderos.
Ahora, los japoneses están rodando una nueva versión. En ella el bicho tendrá una altura de ¡118 metros! Aunque el reto está en lograr que también parezca más ágil y atlético que el americano. Vamos, que este nuevo Godzilla necesita más sushi en su dieta, y menso hamburguesas.
Vicente Fernández López
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