En Aviemore, Escocia, perros esquimales del norte y conductores se preparan para la 33ª edición anual de la «Race Aviemore Sled Dog», una carrera de trineos organizada por el Club de Husky siberiano de Gran Bretaña. En la carrera participan 1.000 perros de trineo, dirigidos por 250 «mushers». El mushing, aunque actualmente se considera un deporte, ha sido (y todavía es) una forma de transporte nórdica caracterizada por el uso de perros de tiro y esquís. al corredor de esta modalidad se le denomina musher. Aquí reunimos imágenes de los preparativos de la carrera y participantes de otros años.
Una pelea de huskies mientras se preparan para practicar días antes de la carrera.
Existen distintas categorías, que se distinguen entre ellas en función del número de perros que tiran del trineo y de la longitud de las trails o pistas de la carrera. La categoría Pulka, admite la participación con un solo perro y establece un recorrido con una distancia de entre 8 y 12 km.
Emily Squire una conductora de trineo y sus perros esquimales. Las relaciones entre ellos son muy estrechas.
El arrastre de trineos de perros es un deporte moderno, que nació el siglo pasado en Alaska.
En Europa, este deporte comienza a practicarse a medidos del siglo XX.
El husky siberiano es una raza de perro de trabajo originaria del noreste de Siberia (Chukotka, Rusia). Esta raza presenta un acusado parecido con el lobo.
En España la carrera de perros nórdicos más importante que se celebraba era la «Pirena», que tenía lugar anualmente en los Pirineos. El objetivo era cruzar los Pirineos de Oeste a Este, pasando por Aragón, Cataluña, Andorra y Francia. Lamentablemente dejó de celebrarse en 2013.
La carrera más famosa y dura es, sin duda, «Iditarod Trail Race» (Carrera de Pista de Iditarod), conocida como «Tha Race» (La Carrera), que recorre más de 1600 Km desde Anchorage hasta Nome en Alaska.
El husky siberiano originalmente fue criado por la tribu chukchi, en la que se utilizaba como perro de compañía, para pastorear a los ciervos, tirar de los trineos y mantener calientes a los niños; en la actualidad se encuentra en muy diversas zonas del mundo.
«Colmillo blanco” , el personaje ficticio del título de Jack London es un perro que tenía sólo 1/4 de Husky y 3/4 de lobo, pero el escritor sentía un gran afecto y admiración por la raza husky. Su otro famoso personaje canino, Buck, en “La llamada de lo salvaje” era un Husky y London recrea vívidamente carreras de trineos tirados por perros.