Mucha gente (sobre todo jóvenes) es reacia a usar preservativos porque dicen que con ellos disminuye la sensación de placer. Lo que aumenta el riesgo de tener embarazos no deseados o de contagiarse con una enfermedad de transmisión sexual.
Para solucionar ese problema, numerosos laboratorios llevan tiempo trabajando en el diseño de condones que favorezcan cada vez más la sensibilidad de la pareja durante el acto sexual. Y, ahora, un equipo de investigadores británicos, financiados por la fundación de Bill y Melinda Gates, han diseñado un prototipo de preservativo que se autolubrica. Los resultados se ha publicado en Royal Society Open Science.
La superficie de látex del preservativo está recubierta por polímeros hidrofílicos que atraen las moléculas de agua. Eso hace que, al entrar en contacto con una superficie húmeda se vuelvan más resbaladizos, disminuyendo la fricción y con ella el riesgo de dolor durante el coito. Este tipo de polímeros ya se habían usado en catéteres urinarios para disminuir las molestias de los pacientes.
Los resultados d ellos tests realizados revelan que este prototipo de preservativo aumenta la sensibilidad, sin que ello afecte a la resistencia y a su capacidad protectora.
Fuente: BBC.