Han decidido que su anagrama necesitaba un cambio, las concesiones una imagen más actual y sus coches una dosis extra de emoción. En consecuencia, Citroën ha iniciado la revolución. Con un nuevo logo más achatado, el propósito de remodelar todos los puntos de venta y, lo que es más impactante, una línea de modelos absolutamente emocionales. Se pondrán a la venta bajo la denominación DS (así se denominaba al viejo y nostálgico Tiburón).
El primero de ellos es el DS3 que se muestra en la imagen y del que la marca todavía no ha dado ningún dato, salvo que se comercializará en 2010. Está en fase de prototipo y, sin duda, será una de las estrellas que protagonizarán el próximo Salón del Automóvil de Ginebra. La gama se completará más adelante con un DS4 y un DS5. Os los iremos mostrando en cuanto tengamos las primeras imágenes.
Marta García Fernández