El objetivo del foro es examinar los puntos en común que unen a juristas y especialistas informáticos. En pocas palabras: confrontar la red con la ley. Y ver en qué lugar estamos.
En principio, pues termina hoy, 3 de junio, a las 19:00, el foro ha dejado algunas conclusiones que no sólo reflejan la frontera que divide el mundo real del mudo virtual (y sus conflictos), también podrían definir el futuro de internet.
Así como los esquimales tienen un derecho para el invierno y otras leyes para el verano, pues la vida en estas épocas son distintas, en el foro se planteó la idea de generar una suerte de derecho constitucional para el ciberespacio que regule nuestra presencia allí. Algo no del todo descabellado ya que el 40% de los ordenadores españoles están infectados de algún modo que permite obtener los datos bancarios de sus usuarios.
Un hecho que mantiene en constante alerta a los juristas y a las fuerzas de seguridad, es que en la red no existe la soberanía y al combinar esto con el hecho de que las nuevas tecnologías han «virtualizado» el dinero (ya no es necesario darlo en mano para hacer operaciones comerciales) hace que las denuncias por delitos cibernéticos estén en permanente alza. Esto permite deducir que el mundo ya no es sólo el real, en el que creemos vivir, pues también vivimos y actuamos en un mundo virtual; a través de las redes sociales, por ejemplo.
Así han surgido dos de las preguntas más interesantes del foro: ¿Debería existir una mayoría de edad tecnológica? ¿Una licencia para usar internet?
Y por otro lado: ¿Qué ocurriría si el anonimato que tenemos en el mundo virtual pasara al mundo real?
Redacción QUO