La polémica sobre la calidad del nuevo iPhone ha hecho que el propio presidente de Apple, Steve Jobs, responda ante sus usuarios. El problema del iPhone 4G radica en la antena y su conectividad.
La revista estadounidense Consumer Reports demostró que el telefóno pierde señal al tocar la esquina inferior izquierda. Apple reconoció el fallo y lo vinculó al software encargado de mostrar la intensidad de señal que recibe el teléfono.
Según la compañía el mal cálculo de las “barras” de cobertura hace que el usuario vea una intensidad de señal que no es real, y en entornos de baja cobertura, las interferencias de la mano o el cuerpo hacen que se acabe perdiendo la señal.
Pero en este fallo de conexión el diseño tiene mucho que ver. Este nuevo modelo incorporó los bordes de metal, lo que hacen un móvol más ligero, fino y atractivo, pero como afirma Rubén Caballero, ingeniero de Apple, la antena de metal resta conectividad. Problema que no habría existido si el sistema de antena se hubiera dividido en varios tramos.
Sea como sea, la compañía de la manzana regalará a todos los usuarios que adquieran el aparato hasta el 30 de Septiembre unas fundas de goma que protegen el dispositivo de las interferencias. Aún así, los clientes insatisfechos podrán devolver el terminal en 30 días.
Redacción QUO