Mejorar la marca no siempre depende de entrenar más, sino de correr mejor. Para lograrlo la tecnología nos echa una mano. En el Instituto Valenciano del Pie analizan la biomecánica de la marcha para corregir la pisada, evitar posibles lesiones y mejorar el rendimiento. Al corredor se le colocan sensores en los pies y se graba su marcha con cámaras para obtener cientos de datos que sirven para elegir la zapatilla más adecuada y detectar errores al correr. Previamente el pie se digitaliza en tres dimensiones para conocer todos sus volúmenes. Como es un deporte muy técnico, cualquier mejora tiene efectos muy relevantes en las marcas de los corredores de élite y en los populares.
Redacción QUO