El nivel de estrés que sufre el bebé durante el embarazo podría acelerar el envejecimiento, según una investigación del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, CNIO. Lo probaron en ratones: viven dos años, pero los que padecieron estrés en su gestación, a los dos meses tenían un aspecto extremadamente envejecido. El estrés metabólico de las embarazadas aumenta las posibilidades de que lo sufra el bebé. El daño celular que acelera el envejecimiento se produce durante la gestación, que es cuando más división celular se registra en el humano. Una vez nacido, este daño permanecería en las células de los órganos.
Redacción QUO