Ellas
El 70% de las mujeres que utilizan lubricantes lo hacen para tener sexo más placentero y divertido.
Las revisiones ginecológicas serían menos ingratas si se usase un espéculo recubierto con gel lubricante, según una investigación reciente.
El principal motivo para iniciarse en el uso de lubricantes es la sequedad vaginal y el temor a sufrir desgarros, algo que ocurre por la disminución de estrógenos en la menopausia, por fumar, etc.
Igual que en el hombre, las arterias del área genital se dilatan y aumenta el torrente sanguíneo. Cuanto mayor es la excitación, más se activan las glándulas de la vagina y alrededores.
El aroma a frutas cítricas que desprenden algunos aceites, preservativos y cremas, estimula el apetito sexual femenino.
Ellos
Reserva los condones con sabores para las relaciones sexuales orales, porque las sustancias que les dan sabor pueden causar infecciones.
No hay gran diferencia de ventas entre hombres y mujeres, pero el usuario gay hace que los números se desmarquen a favor de ellos.
El lubricante debe iniciarse en la base del pene, la zona más próxima al abdomen. Seguido de una caricia en el glande formando círculos con la yema de los dedos y en los testículos, manteniendo el ritmo.
Un vínculo irracional entre potencia sexual y virilidad lleva a consumir tratamientos fraudulentos, como pastillas, aceites y cremas alargadoras,muchas veces ineficaces y sin ningún sustento científico.
Una crema que emitiera una fusión de aromas de lavanda y calabaza incrementaría un 40% el flujo sanguíneo hacia el pene, según un estudio.
Redacción QUO