Una idea que parece extraída de una historia de ciencia ficción, pero que podría ser realidad en 2014. El responsable de este sorprendente proyecto es el arquitecto holandés Janjaap Rujssenaars. Su plan consiste en utilizar una impresora del tipo D-Shape para imprimir bloques de 6 x 9 metros, formados por capas de arena y aglutinantes inorgánicos, y que luego se irán ensamblando hasta completar la edificación. Si todo funciona como es debido, la construcción de la casa llevaría aproximadamente año y medio. Y el resultado tendría el aspecto de la imagen.
Redacción QUO