Madame. Mujer que regenta un prostíbulo.
Madonna. (EEUU, 1958). Cantante que ha aliado a su imagen un erotismo transgresor, hasta el punto de que algunos de sus vídeos han sido censurados, como Justify mi love (1990), donde asiste a una orgía* con voyeurs* y prácticas sadomasoquistas*.
Maithuna. En el hinduismo, unión sexual o cópula, a menudo en el contexto sagrado del tantrismo*.
Masaje. En el mundo del erotismo se usa como preparación para el acto sexual.
Masoch. (Ucrania, 1835-1895). Escritor famoso por La venus de las pieles (1870), donde muestra su fascinación fetichista* por estas prendas cuando las lleva una mujer desnuda, así como su pasión por el sexo inasequible y cruel.
Masoquismo. Excitación sexual por la crueldad y el dolor. De Masoch*, quien, en su obra La Venus de las pieles, acuñó el personaje de Severin bajo estas características.
Masturbación.Excitación manual de los órganos sexuales.
Matrimonio nasamoniano. Costumbre por la cual la novia debe copular en su noche de bodas con los hombres de su tribu. Heródoto la documentó desde la Antigüedad, practicada por los nasamonianos de Cirene (Libia). Véase Otiv Bombari*.
Medicina de los tres picos. Término chino para referirse a las propiedades curativas de los fluidos que manan de los “tres” picos de la mujer: boca, pezones y sexo.
Ménades. Sacerdotisas que, en las fiestas de Dioniso*, eran “poseídas por el Dios” y recorrían enloquecidas los bosques violando e, incluso lastimando, a los hombres que se atrevían a adentrarse en ellos.
Ménage à trois. Acto sexual entre tres personas.
Mernissi, Fátima (Marruecos, 1940). En Sueños en el umbral (1995), Mernissi nos lleva a un harén real en el Marruecos de los años 40, donde transcurrió su niñez; a veces nos turba con imprevistos fogonazos eróticos, como cuando describe la salvaje sensualidad de la rifeña Tamou, o el descubrimiento por las mujeres del harén de que un niño ha dejado de serlo.
Metal blanco. Término chino para referirse a las secreciones femeninas en el momento del orgasmo *.
Meyer, Russ. (EEUU, 1922-2004). Director de cine responsable de las famosas Vixens, mujeres de enormes senos y extremadamente lúbricas. Películas como Vixens (1968), Supervixens (1975) y Beneath the Valley of the Ultravixens (1979) fueron un icono de la contracultura de los setenta.
Mil y una noches, Las. (Península Arábiga, compiladas entre los siglos XVI-XVII). Conjunto de historias transmitidas oralmente desde el s. X y que recogen la tradición erótica oriental, con relatos enormemente afrodisíacos y de gran belleza, como el de Kamaralzamán y Budur, y otros turbadores y trágicos, como el que da marco al resto de las narraciones y que describe las infidelidades de la mujer del rey Schahriar. En Europa, sólo se conocieron en el s. XVIII, gracias a la versión francesa de Galland, editada de 1706 a 1714.
Miller, Henry. (EEUU, 1891-1980). Novelista que, en obras como Primavera negra (1936) y Trópico de Capricornio (1939), supo dar forma a las fantasías sexuales * del hombre del siglo XX, caracterizadas por la elección indiscriminada, la facilidad, el fisiologismo, la rapidez y la anteposición de la cantidad a la calidad.
Misionero. Postura en la que el hombre hace el amor sobre la mujer, llamada así porque fueron los misioneros quienes la exportaron a los países que evangelizaban, para cuyos nativos, acostumbrados a otras prácticas, resultaba extraña.
Mitakuku. Forma de algolagnia* practicada en la Melanesia (Pacífico Sur) consistente en morder las pestañas del amante.
Mitchell, hermanos. Jim (USA, ¿1944?) y Artie Mitchell (USA, 1945-1991), pioneros y magnates del porno americano, responsables de éxitos tan sonados como Tras la puerta verde (1972) y La resurrección de Eva (1973), protagonizadas por la mítica Marilyn Chambers*.
Mylitta. (Oriente Próximo). Diosa del erotismo, en cuyo templo las mujeres que iban a contraer matrimonio debían prostituirse al menos una vez en su vida.
Otras curiosidades:
Masaje. Una serpiente sobre tu piel
Esa quizá sea la metáfora más adecuada para expresar la sensación que produce un masaje erótico: la de una lujuriosa serpiente reptando sobre la piel.
El masaje consiste en presionar la piel con las manos o con instrumentos específicos. Y cuando su finalidad es erótica, tiene como meta lograr la excitación de la persona, ya sea como culmen en sí misma o como preparación para el acto sexual. Son famosas las casas de masajes de Bangkok (Tailandia), donde, entre muchas variedades, se practica el body to body, que comienza con la masajista y el cliente tomando un baño desnudos. A continuación, ella coloca al cliente en un colchón a ras del suelo y lo enjabona abundantemente. Se enjabona ella a su vez y comienza a frotar su cuerpo teniendo como norma no utilizar nunca las manos. Tras unos veinte minutos y, hallándose el cliente situado en posición de decúbito supino, se puede practicar el coito, aunque la eyaculación no implica necesariamente el final del masaje.
Redacción QUO