Cada vez hay más evidencias de que los hombres prehistóricos no tenían reparo en practicar el canibalismo. Pero, ¿por qué lo hacían? Por simple instinto de alimentarse, parece la respuesta evidente. Pero una nueva investigación realizada por James Cole, un arqueólogo de la Universidad de Brighton, parece desmentirlo.
Según las conclusiones extraídas por Cole, el canibalismo no es una dieta que pueda considerarse muy nutritiva. El investigador calculó que devorando a un ser humano completo se consumirían unas 32.376 calorías, muchas menos de las que se obtendrían comiéndose a un jabalí, un caballo o una vaca (cuya carne, además, duraría más tiempo).
¿Por qué entonces recurrían a esta práctica? Para el investigador lo que más sentido tiene es pensar que, en la mayoría de los casos, el canibalismo tuviera un sentido ritual. Aunque tampoco descarta que se recurriera a él en épocas de escasez de caza, o tras algún combate con una tribu enemiga.
De todas formas, parece que se ha pasado por alto la conclusión más sorprendente de este estudio. ¿Realmente sabían los hombres prehistóricos contar calorías y calcular el valor nutricional de un alimento?
Fuente: Nature.
Vicente Fernández López