Los seres humanos ya acudían al dentista hace trece mil años. Así lo revela el hallazgo realizado por arqueólogos italianos que han analizado dos dientes de un varón de la Edad de Hielo, y en los cuales han encontrado evidencias de primitivos empastes.
Las piezas dentales analizadas son dos caninos superiores, y fueron perforadas hasta la pulpa. Una tarea para la con toda seguridad se utilizó una piedra afilada, lo que hace pensar que debió de resultar muy doloroso para el paciente.
Luego, los orificios fueron rellenados con una sustancia parecida al alquitrán, que los hombres primitivos utilizaban para reparar sus armas. También añadieron pelo humano y paja a la mezcla, probablemente para que actuarán como antiséptico de la herida.
Fente: IFL Science.
Vicente Fernández López