El próximo 27 de julio comenzará una expedición de dos meses de duración, conducida por 30 científicos de una docena de países en búsqueda de Zealandia. Se sabe que se separó de Australia hace 80 millones de años y que con el paso del tiempo, el 95% de su superficie acabó hundiéndose bajo el océano Pacífico. Ahora, este equipo, junto con el “International Ocean Discovery Program”, estudiará Zealandia perforando en 6 puntos de la corteza continental de más de 3 millones cuadrados que está bajo el agua. Su idea es conseguir muestras de sedimentos que están a unos 300 metros de profundidad, en el lecho marino. De tal forma que podrán analizar los fósiles que encuentren para definir un registro de cómo Zealandia cambió con el tiempo.
Según apunta uno de los científicos a bordo, el profesor de Ciencias de la Tierra y Medio Ambiente en el Queens College de la Universidad de Nueva York, Stephen Pekar: “Se trata de una especie de Atlántida, pero para los dinosaurios. Fue en ese momento cuando comenzó a hundirse, pero hace unos 50.000.000 de años empezó a elevarse, y luego comenzó a hundirse a más velocidad”.
Llegados a este punto: ¿es posible considerarlo continente? Durante décadas ha estado sobre la mesa la posibilidad de denominarlo así, ya que posee las características para referirse a él de esta manera, pero aún no se ha conseguido. Lo que vemos sobre el mar es solo una parte, lo que conocemos como Nueva Zelanda, pero según los científicos, hace 100 millones de años, la Antártida, Australia y Zealandia fueron un solo continente.
La expedición que comienza esta semana quiere saber cómo hemos llegado hasta ahora, pero para ello, deben ir al origen, a cómo empezó todo. Por ello, esperan que las muestras que consigan les ayuden a dar con una interpretación de lo que pudo suceder, el clima de la zona y la historia de su desaparición. Si consiguen dar respuesta a estas preguntas serán capaces de entender también cómo ha evolucionado el cambio climático en los últimos 60 millones de años.
Estaremos atentos a lo que descubran.
Fuente: Newsweek
Alberto Pascual García