Hoy, 22 de marzo, es el Día Mundial del Agua, una iniciativa de Naciones Unidas (ONU) para recordar los problemas relacionados con este recurso. Según los responsables de esta institución, las consecuencias relacionadas con el consumo de agua no potable provocan cada año más víctimas mortales en todo el mundo que cualquier tipo de violencia, incluida la guerra. Se estima que hay 884 millones de personas sin acceso a este bien escaso en todo el planeta.
Otro dato escalofriante que ha dado a conocer la ONU es el de la mortalidad infantil atribuida a la falta de acceso a agua en condiciones sanitarias seguras: cada 15 segundos muere un niño por una enfermedad causada por este problema. En ese sentido, la ONU subraya que más de 2.500 millones de personas viven sin un sistema adecuado de saneamiento.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha señalado que no es un problema de escasez, sino de gestionar de forma eficaz y sostenible este recurso y de poner al alcance de todos los ciudadanos del mundo los sistemas necesarios para distribuirlo en condiciones seguras.
Redacción QUO