Las condiciones para la vida en planetas completamente cubiertos de agua, son más flexibles de lo que se pensaba. Esa es la conclusión de un estudio, publicado en The Astrophysical Journal. El hallazgo abre la posibilidad de que los conocidos como “mundos de agua” puedan ser habitables.
Hasta ahora gran parte de la comunidad científica había asumido que los planetas cubiertos de agua no permitirían la presencia del ciclo de minerales y gases que mantienen el clima de la Tierra estable y, por lo tanto, no serían capaces de albergar vida.
Debido a que la biología necesita un período prolongado para evolucionar y que la luz y el calor en los planetas pueden cambiar a medida que envejecen las estrellas, los científicos generalmente buscan planetas que tuvieran un poco de agua y mantuvieran sus climas estables con el tiempo.
Pero este modelo no funciona en un mundo acuático, con aguas profundas que cubren la roca y suprimen volcanes.
Sin embargo, en este estudio, liderado porEdwin Kite, descubrió que los planetas oceánicos podrían permanecer mantener esta estabilidad por mucho más tiempo de lo que se suponía, creando así una ventana para la Vida. Los autores basaron sus hallazgos en miles de simulaciones de planetas generadas aleatoriamente. El objetivo era someterlos a diferentes escenarios: estrellas más o menos cerca, más o menos agua, profundidad de los océanos, tamaño del planeta, etc.
«La sorpresa fue que muchos de ellos se mantuvieron estables durante más de mil millones de años – explica Kite en un comunicado –. Nuestra mejor suposición es que se trata de un 10% de ellos.».
Aunque las simulaciones se llevaron a cabo con estrellas similares al Sol, los resultados son optimistas también para planetas orbitando enanas rojas, “teóricamente, todo lo que necesitarían es la luz constante de una estrella”, concluyen los autores.
Juan Scaliter