Tras proyectar el diseño del fotolito en un bastidor a tamaño original, éste se lava y se sujeta; el dibujo empieza a apreciarse y se comienza el retocado de imperfecciones.
ESTAMPACIÓN
Se empapa el molde con las tintas elegidas y después se lava el bastidor con un chorro a presión para poder eliminar el sobrante.
Se coloca la tela en un rulo que se introduce en una especie de centrifugadora gigante. Después, se libera vapor para que la tinta se fije.
Se lava otra vez la tela para suavizar las tintas, eliminar los excesos y ajustar plenamente el color. Finalmente, mientras sale la pieza entera se plancha.
El rulo de tela, con la misma bandera repetida, llega a la zona de corte, donde se verifica su calidad minuciosamente.