Tiffany trucado
Para Metamorfosis, aunque parezca increíble, Macdonald utilizó solo tres fotografías: la modelo, el paisaje y el marco de la ventana. El vitral está completamente hecho por ordenador. Además, el trabajo completo lo llevó a cabo en solo 10 días.
Esto es un Juego
La obra se llama Peregrinación, y es un homenaje al juego de Serpientes y Escaleras. A Macdonald le llevó 5 meses de trabajo, “aunque no de 8 horas diarias”, aclara. En la imagen se combinan cerca de 600 fotografías, y hay más de 20 situaciones imposibles: puentes en distintos niveles, columnas que soportan techo y suelo, y escaleras que suben hacia abajo.
Escalera al suelo
Una de las obras más conocidas del artista holandés Maurits Cornelis Escher es Relatividad (arriba). En ella conviven, desafiando las leyes de la física, tres fuentes de gravedad, cuyos centros podrían ser los tres parques que se ven a través de las ventanas. Hay tres escaleras, y en cada una hay dos personajes que viven bajo una gravedad diferente. Esto es lo que produce asombro: dos personajes utilizan la misma escalera, pero en universos casi opuestos.
Rezar en 3D
Esta ilusión, basada en la Basílica Koekelberg (Bruselas), juega con una escalera que nunca termina (un verdadero suplicio de Tántalo para las de la limpieza). Macdonald unió unas 60 fotografías para alcanzar el efecto deseado. La cadena está hecha con tecnología 3D.
Cuando arriba es abajo, y viceversa
La Terraza es probablemente la ilusión más conocida de Macdonald. Está inspirada en uno de sus dos artistas predilectos, el sueco Oscar Reutersvard (el otro es el archiconocido M. C. Escher).
La piscina
Es la primera obra de David Macdonald. Este artista inglés afincado en Bélgica comenzó a experimentar con las ilusiones visuales con esta imagen. El resultado se logró tras una combinación de aproximadamente 20 fotografías.
Aquí no hay quien viva
El truco consiste en dos fotografías superpuestas de un edificio. Una de ellas es de frente, y la otra de perfil. La unión es imperceptible porque la ocupa la columna de ladrillos. En este edificio vive Macdonald. Aunque ni él es el fontanero de la imagen, ni su mujer es la del bikini.