La última vez que se consiguió fotografiar a esta extraña especie fue hace 50 años. Se trata del perro salvaje de las tierras altas de Nueva Guinea, cuyo hábitat predilecto se ubica en zonas remotas de montaña de esta isla. También fue vista y retratada en 2012 y en 2005, pero en ninguna de estas dos ocasiones pudo confirmarse de que se trataba de esta huidiza raza de perro.
Se trata de una de las pocas especies salvajes de perros que quedan en nuestro planeta y en cuyo linaje no ha mediado la intervención humana. Según explica Science Alert,la raza que más similitudes guarda con estos cánidos es el perro cantor de Nueva Guinea, llamada así por su aullido a coro tan característico. Actualmente, la especie está en peligro de extinción, ya que solo quedan 30 ejemplares en el mundo.
Los esquivos perros fueron encontrados gracias a un equipo de biólogos, que se desplazaron hasta Puncak Jaya dispuestos a dar con ellos. Lo primero que encontraron fue una huella, razón que les llevó a instalar cámaras con el fin de ‘pillarles infraganti’. Y lo consiguieron. Fue así como obtuvieron más de un centenar de imágenes para confirmar su existencia.