Investigadores holandeses desarrollan un método más preciso que los tradicionales para saber la hora exacta de la muerte en la escena de un crimen
Uno de las claves para resolver un crimen con resultado de muerte es saber la hora exacta en la que murió la víctima. El método más común es medir la temperatura corporal, algo que se descubrió en el siglo XIX. En concreto se mide la temperatura rectal que, desde el momento de la muerte, va descendiendo progresivamente.
Pero este método tiene limitaciones: el riesgo de alterar otras pruebas al medir la temperatura, y no tener en cuenta el peso o la composición corporal que influyen en el ritmo de pérdida de calor. Por eso los investigadores de la Universidad de Ámsterdam han creado un método más eficiente. Usando el sistema tradicional hay de error de 3 a 7 horas. Con el nuevo método no se suele desviar más de una hora de el momento real la muerte.
«El siguiente paso es llevar este nuevo método a la escena del crimen. Pero aún no se usará como evidencia ante los tribunales», dice Maurice Aalders, uno de los autores del estudio. El nuevo enfoque consiste en recopilar diferentes datos de la escena del crimen y simularlos por ordenador. Datos como la temperatura del aire y de la piel de la víctima (medida de forma no invasiva con con cámara térmica o sensores), la posición y el tamaño del cuerpo, o detalles de la vestimenta se incorporan a la simulación.
Todos estos datos aparecen en la recreación en forma de una matriz de cubos. Cada elemento de la escena del crimen representa un cubo en la simulación. Una vez introducida la temperatura de cada uno de los elementos a analizar, el ordenador calcula la velocidad a la que se transfiere el calor de un elemento a otro, en este caso, de un cubo a otro. Con esta información se puede estimar con más precisión cuánto ha cambiado la temperatura del cuerpo de la víctima y así saber el momento exacto de la muerte.
Aunque este modelo es ya un avance considerable en comparación con los métodos tradicionales, Maurice Aalders, uno de los creadores de este nuevo método, afirma que están trabajando para perfeccionarlo. «Se pueden obtener resultados aún más precisos recreando la escena del crimen en 3D. Eso se conseguiría fotografiándola desde todas las direcciones. De esta manera, se pueden recrear con más precisión los cuerpos, posiciones y situaciones y ser más exactos», afirma.
REFERENCIAS
Reconstructing the time since death using noninvasive thermometry and numerical analysis
Un altavoz que se conecta a Alexa podría resolver un sangriento crimen