Los jóvenes neozelandeses ya nunca podrán comprar cigarrillos con la nueva normativa que aumentará progresivamente la edad legal para fumar
Nueva Zelanda dio ejemplo al principio de la pandemia de COVID-19, con un control temprano y férreo que mantuvo al país muy alejado de los niveles de infección del resto del mundo desarrollado. En un nuevo paso para mejorar la salud de sus ciudadanos, el gobierno de Nueva Zelanda anunció el jueves que prohibirá a los jóvenes comprar cigarrillos de por vida, uno de los enfoques más duros del mundo para frenar las muertes por tabaquismo, como parte de un plan más amplio que se centra en el impacto desproporcionado sobre su población indígena maorí.
Nueva Zelanda es ya uno de los 17 países en los que es obligatorio el empaquetado de los cigarrillos sin ningún tipo de logotipo de marca o publicidad, solo con las fotos y mensajes disuasorios y el nombre de la marca en texto normal. También prohíbe la venta a menores de 18 años, pero el gobierno afirma que estas medidas no son suficientes para alcanzar su objetivo de que la tasa nacional de fumadores adultos descienda al 5% en 2025.
Las personas que tengan 14 años o menos en 2027 nunca alcanzarán la edad necesaria para comprar tabaco
Nueva Zelanda planea hacer ilegal la venta de cigarrillos a cualquier persona que en 2027 tenga 14 años o menos. La prohibición se mantendrá durante el resto de la vida de la persona, aumentando un año cada año la edad mínima para poder fumar, con lo que nunca será legal para ellas comprar tabaco. Esto significa que una persona de 60 años en 2073 tendrá prohibido comprar cigarrillos, mientras que una persona de 61 años todavía podrá hacerlo.
Las autoridades sanitarias neozelandesas afirman que los fumadores suelen adquirir el hábito durante la juventud: cuatro de cada cinco neozelandeses empiezan a fumar a los 18 años y el 96% a los 25. Si se consigue que una generación deje de fumar, se espera evitar unas 5.000 muertes evitables al año.
La intención del gobierno neozelandés es promulgar esta legislación a finales del año que viene. Primero limitará el número de tiendas que pueden vender cigarrillos a partir de 2024. A continuación, reducirá el nivel de nicotina a partir de 2025, para facilitar su abandono. Por último, introducirá la generación «sin humo» a partir de 2027. La intención es introducir los cambios en fases para disminuir el impacto económico en los minoristas y dar tiempo para que se adapten las personas con problemas de salud mental, que tienen una tasa de tabaquismo mucho más alta que la media.
La generación sin humo
Las autoridades neozelandesas no han dicho cómo piensan vigilar la prohibición, ni a qué minoristas se les prohibirá vender productos de tabaco. Se espera que se den más detalles cuando se presente la legislación al Parlamento el año que viene.
Esta legislación no convierte a Nueva Zelanda en el país más restrictivo del mundo. El reino de Bután en el Himalaya prohibió totalmente la venta de cigarrillos en 2010 (aunque levantó la prohibición temporalmente en 2020 para frenar las importaciones del mercado negro desde la India durante el cierre de la frontera COVID-19).
¿QUÉ PASA AHORA?
Un grupo de trabajo maorí en el que participan expertos en control del tabaco y en salud pública consultará el plan, que el gobierno neozelandés quiere convertir en ley a finales de 2022.