A veces, los animales hacen de las ruinas antiguas o edificios históricos su hogar, y se adaptan a nichos ecológicos únicos que son diferentes de su entorno natural original
La naturaleza siempre encuentra un camino. A veces, los animales hacen de las ruinas antiguas o edificios históricos su hogar, y se adaptan a nichos ecológicos únicos que son diferentes de su entorno natural original. Murciélagos, aves rapaces, reptiles, insectos, roedores o incluso mamíferos más grandes pueden utilizar las ruinas como escondites o como lugares para criar a sus crías.
La presencia de estos animales puede tener tanto aspectos positivos como negativos. Por un lado, pueden contribuir a la biodiversidad local y conservar nichos ecológicos específicos. Sin embargo, también pueden presentar amenazas para la conservación de las ruinas y las personas que las visitan, y al mismo tiempo, las personas pueden representar una amenaza para ellos.
Por ejemplo, los murciélagos, aunque son útiles para el control de plagas, pueden acelerar la degradación de monumentos antiguos a través de sus excrementos, conocidos como guano. El manejo de la fauna que habita en las ruinas es una tarea delicada que a menudo implica compromisos entre la protección del patrimonio y la conservación de la biodiversidad.
Aunque las especies específicas varían según la ubicación geográfica, el clima y otros factores, algunos animales comúnmente encontrados en estos entornos incluyen:
1. Murciélagos en las Pirámides de Egipto
Las diversas pirámides y tumbas en Egipto albergan varias especies de murciélagos. Estos animales encuentran en las pirámides un ambiente oscuro y seguro para refugiarse y criar a sus crías. Los murciélagos son conocidos por habitar en estructuras antiguas. En concreto, el murciélago egipcio de tumba (Taphozous perforatus) es micromurciélago de tamaño mediano con una masa aproximada de 30 g.
2. Palomas en el Coliseo, Roma
El Coliseo de Roma, uno de los monumentos más icónicos del mundo, es también el hogar de numerosas palomas. Estas aves han adaptado sus nidos a las cavidades y cornisas del antiguo anfiteatro, y se benefician de la proximidad a fuentes de alimentos proporcionadas por los turistas.
3. Macacos y lémures en los Templos de Angkor Wat, Camboya
Los bosques alrededor de los templos de Angkor Wat en Camboya albergan varias especies de lémures y otros primates como los macacos. Estos animales han encontrado un hogar en las ruinas, y su presencia es un importante atractivo turístico, aunque también plantea cuestiones de conservación.
4. Lagartijas en Machu Picchu, Perú
Este famoso sitio arqueológico es también un hábitat para varias especies de lagartijas y reptiles. El clima y la vegetación circundante ofrecen un ambiente ideal para estos animales, que se adaptan bien a las estructuras de piedra.
5. Cormoranes en las Ruinas de Alcatraz, EE UU
La antigua prisión de Alcatraz, ahora una ruina, se ha convertido en un importante lugar de anidación para los cormoranes. Estas aves marinas utilizan las estructuras abandonadas para colocar sus nidos, y el sitio ha ganado relevancia como una reserva de aves.
Cada uno de estos casos presenta un conjunto único de desafíos y oportunidades para la conservación tanto del sitio histórico como de las especies que lo habitan. El manejo cuidadoso es esencial para equilibrar la preservación del patrimonio cultural con las necesidades ecológicas de estas especies.
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No será que los «monumentos» ocubaron sus habitats?