El colapso de una de las corrientes oceánicas del Atlántico podría tener consecuencias globales durante siglos

En una carta abierta, 44 destacados climatólogos, incluido Michael Mann de la Universidad de Pensilvania, piden a los líderes políticos de los países nórdicos que actúen frente al riesgo inminente de que la Circulación Meridional de Oscilación del Atlántico (AMOC), que incluye la Corriente del Golfo, se debilite y colapse.

La AMOC es una especie de cinta transportadora gigante en el océano Atlántico que lleva calor al hemisferio norte. Según los científicos, estas corrientes se están ralentizando debido al calentamiento global, lo que podría llevar a un punto de no retorno y alterar el clima de manera drástica. «Un cambio así en la circulación oceánica tendría consecuencias devastadoras e irreversibles, especialmente para los países nórdicos, pero también para otras partes del mundo», advierten en la carta. Estos países incluyen Dinamarca, Islandia, Noruega, Finlandia y Suecia.

Si la AMOC colapsa, podría provocar un enfriamiento significativo y eventos climáticos extremos en los países nórdicos, empeorando una «mancha fría» que ya se observa en el Atlántico Norte debido a la desaceleración de estas corrientes. También podría tener efectos en otras partes del hemisferio norte, como problemas en la agricultura del noroeste de Europa y un impacto en el clima global.

la cinta transportadora de las corrientes del Atlántico

la cinta transportadora de las corrientes del Atlántico

Más frío en el norte, más calor en el sur, subida del nivel del mar

Los científicos señalan que otras áreas también sufrirían las consecuencias de un colapso de la AMOC. Esto podría desplazar los monzones tropicales hacia el sur, afectando gravemente la agricultura y los ecosistemas en esas regiones. Además, la interrupción de estas corrientes podría aumentar el nivel del mar a lo largo de la costa atlántica de Estados Unidos y afectar negativamente a la vida marina y la pesca.

En su carta, los expertos subrayan la necesidad de actuar de inmediato para evitar este escenario, a pesar de la incertidumbre sobre el momento exacto en que podría ocurrir. Aunque el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) considera que hay «una confianza media en que la Circulación Meridional del Atlántico no se colapsará abruptamente antes de 2100», los científicos creen que este análisis es demasiado optimista y que el riesgo se ha subestimado.

«El propósito de esta carta es llamar la atención sobre el hecho de que sólo una ‘confianza media’ en que la AMOC no colapse no es tranquilizadora, y deja claramente abierta la posibilidad de un colapso de la AMOC durante este siglo», escribieron los científicos. «Incluso con una probabilidad media de que ocurra, dado que el resultado sería catastrófico e impactaría en todo el mundo durante los siglos venideros, creemos que hay que hacer más para minimizar este riesgo».

Dirigiéndose al Consejo Nórdico de Ministros, los científicos instan a estos países a tomar en serio los riesgos de un colapso de la AMOC y a presionar a nivel internacional para cumplir los objetivos del Acuerdo de París de 2015, que busca limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius sobre los niveles preindustriales.

REFERENCIA

Open Letter by Climate Scientists to the Nordic Council of Ministers

Imagen principal: NOAA