Para proporcionarnos una imagen lo más real posible de Marte, la sonda Phoenix lleva a bordo dos dispositivos muy prácticos: se trata de calibradores de color. Cada vez que la Phoenix tome una fotografía del Planeta Rojo, incluirá en ella los pequeños aparatos. Al comparar las imágenes, se podrán evaluar los tonos reales y la composición del terreno.
Redacción QUO